La sombra de la Luz |
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Defiéndeme de las fuerzas contrarias,
en el sueño nocturno cuando no soy consciente,
cuando mi sendero se hace incierto.
Y no me dejes nunca más,
no me dejes nunca más. |
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Devuélveme a las zonas más altas,
a uno de tus reinos de calma.
Es tiempo de escapar de este ciclo de vida.
Y no me dejes nunca más,
no me dejes nunca más. |
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Por qué los gozos del más profundo afecto
o del anhelo más sutil del pulso
sólo son la sombra de la luz. |
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Recuérdame lo infeliz que me siento
lejos de todas tus leyes.
Cómo no malgastar el tiempo que me queda.
Y no me dejes nunca más,
no me dejes nunca más. |
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Por qué la paz de ciertos monasterios
o la armonía vibrante de todos mis sentidos
sólo son la sombra de la luz. (F. Battiato) |
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COMO UN CAMELLO EN UN CANALÓN - 1991 |