La Serpiente
 
Al hombre fue dicho:
“Tú caminaras por siempre.
Viajarás y sombras
llevarás a la espalda”.
Y sus ojos miraban sorprendidos,
manos fuertes y pálidas,
daban vueltas por las dolientes ciudades
de occidente,
oscura sociedad
donde encajes y harapos
se mezclaban.
“Estamos vivos”,
todos gritaban.
 
El dinero reptaba
como la serpiente.
En la ciudad de occidente
así se celebraba,
pero en otra parte
un hombre nuevo nacía. 
 
Al hombre se dijo:
“Tú caminaras por siempre.
Viajarás y sombras
llevarás a la espalda”.
Caminaba como se le había dicho,
sin descanso, caminaba.
Se ensombrecía su rostro
pero el corazón en llamas
lo guiaba. 
 
Un rayo de luz a travesó
un cielo negro y amenazante
llegando a iluminar un árbol de cerezo en flor.
Ante sus ojos, incrédulos y asombrados,
advirtió que algo metafísico había pasado.
Descubrió de golpe la experiencia del blanco.
 
El dinero repta como la serpiente.
En la ciudad de occidente
así se celebra,
pero en cualquier parte,
un hombre nuevo está naciendo.
 (F.Battiato-Sgalambro-F.Battiato)
 
ÁBRETE SÉSAMO - 2012